Buscar este blog

NOTICIAS DE LA DAIA


FESTEJOS DE MASSA Y LA COMUNIDAD JUDÍA (LA NACIÓN - 26/04/10)

El intendente de Tigre, Sergio Massa, compartió ayer con el embajador de Israel en la Argentina, Daniel Gazit, una triple celebración: el bicentenario argentino, el 62° aniversario de la creación del Estado de Israel y los 75 años del Club Náutico Hacoaj, que se realizó en su sede de Tigre. Massa destacó que "el Estado de Israel es la concreción de un sueño y un derecho del pueblo judío a tener su propio Estado". A la vez, el intendente de Tigre señaló: "Nosotros creemos en la libertad en todo sentido. Por eso queremos, como comunidad de Tigre, felicitar a quienes son parte de ese sueño y ese derecho transformado en realidad".

ESE MALDITO ISRAEL Por Marcos Aguinis (LA NACIÓN - 26/04/10)
La sistemática descalificación del Estado de Israel se ha convertido en una moneda corriente tan grave como la descalificación de los judíos que hizo el Tercer Reich para cometer el Holocausto. Así como algunos fanáticos piden ahora un Medio Oriente Israelrein ('limpio de Israel'), los nazis querían un mundo Judenrein ('limpio de judíos'). La misma mecánica. En ambos casos se procura señalarlos como indeseables, criminales, y hasta como bacterias infecciosas.

Dicen que es necesario exterminar ese "cáncer" (Israel, ahora; todos los judíos, antes) como medida de higiene, para que haya paz, para conseguir justicia, para bien de la humanidad. La mayor parte del mundo cree en esas diatribas o duda, o se mantiene indiferente, o es cómplice. Antes de 1939, Hitler promulgó suficiente cantidad de "leyes raciales" que invitaban al más remiso para hacer desaparecer judíos. No hubo una eficaz repulsa a semejante atrocidad. Y la atrocidad pudo llevarse a cabo sin dificultades. Ahora, cualquier ojo informado puede advertir la doble vara con la que se mide a Israel, exagerando siempre sus errores y, al mismo tiempo, dejando al margen sus virtudes. Martilla el concepto de que Israel es culpable, porque bogue o porque no bogue, convertido en victimario despreciable e irredimible, eterno. Por consiguiente, debe ser borrado del mapa, como proclama un jefe de Estado sin que las Naciones Unidas le exijan retractarse siquiera. Se cumplieron 62 años de la independencia israelí. Voy a ser políticamente incorrecto -ya me acostumbré al rol- y señalaré los méritos de Israel

Sólo los méritos. Sus defectos ya inundan la prensa y los corrillos. Es uno de los países más pequeños, con la milésima parte de la población mundial. Fue desértico en la mayor parte de su extensión. No tiene recursos naturales. Está rodeado por un vasto cerco de acoso permanente. Debe mantener activo un ejército popular integrado por sus ciudadanos para defenderse de día y de noche, todos los días y todas las noches. Padece conflictos interiores debidos a su gran pluralidad. No obstante, mantiene la admirable calidad de su sistema democrático y se ha convertido en una potencia científica, cultural y económica. Da envidia. Y, en gran parte, esta envidia genera odio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario